martes, 31 de mayo de 2011

68-51

68-51
El Barça será más complicado, ¿no?

El trabajo bien hecho


Todavía escriben. Alba, Raúl, Virginia. Me consta que todavía escriben porque he leído cosas suyas en estas últimas semanas. Los tres fueron alumnos míos (y de otra mucha gente; no vayáis a pensar que me quiero colgar medallas en exclusiva). Hace ya más de 10 años.
Yo no supongo que escribir es más importante que, por ejemplo, trabajar de fontanero o de croupier en el casino. Yo no creo que los “triunfos” de un profesor-educador se miden en ingenieros, médicos, lingüistas,… “pasados por sus manos-aulas”.
Es mucho más complicado. Pero también cuenta. Cuando alguien te recuerda con un cierto cariño, con aprecio y te dice eso de:”contigo lo pasé bien”; o “tú me hiciste entender que…”; o “en tus clases aprendí…”; entonces es justo reconocer la satisfación del trabajo bien hecho, del haber servido.
Y es eso lo que te hace seguir adelante en el mundo de la educación. A partir de ahí puedes creer que habrá más, mucho más, que lo que a ti te ha llegado.
Y, si no te llega, mal asunto. Algo no funciona como debe.
Pero estábamos en que algunos de mis “ex” siguen escribiendo. Y yo ya no voy a seguir en ese mundo por mucho tiempo. Así que simplemente aprovecho la ocasión para irme retirando un poco más contento por el trabajo realizado.

jueves, 26 de mayo de 2011

Pues eso

DEMOCRACIA REAL YA
Os remito a:
http://juantorreslopez.com/impertinencias/146-impertinencias-de-mayo-de-2011/2398-15-m-ino-podemos-fallar-no-vamos-a-fallar

Que el próximo finde sea mucho mejor que el anterior (aunque perdamos en Madrid... en la Caja Mágica, por supuesto, ¿dónde si no?

jueves, 19 de mayo de 2011

Optimismo

Parece que a medida que alguien se va haciendo mayor, sabe más. O, al menos, es lo que se deduciría de la facilidad y la frecuencia con la que me voy encontrando con preguntas tipo: “¿antes mejor o peor que ahora?”: la educación, la juventud, el cine, el trabajo, la vida,… Preguntas que siempre surgen después de frases del estilo: “tú que ya te vas a jubilar”; “tú que empezaste en esto hace tanto tiempo”;…
¿Se vive mejor que antes?, ¿somos más felices que antes? No se cómo podría medir la “tasa” de felicidad. No llego a comprender qué elementos objetivos, mensurables, la conforman. La felicidad es un sentimiento (que, por supuesto como todos, tiene bases materiales sobre las que apoyarse) y lo único que, quizás, podríamos medir es la relación que cada uno dice tener con ella. Soy muy feliz, bastante, poco, muy poco,… Pero, sólo hablamos de cómo nos sentimos.
Sí tenemos otros indicadores que nos hablan de bienestar. Y algo tendrán que ver con la felicidad porque la mayoría de nosotros elegiríamos siempre o casi siempre estar entre quienes tienen las tasas mayores, y trabajamos, nos esforzamos, nos sacrificamos, por conseguirlo.
He rastreado unas pocas webs (sin demasiado “método”) y he encontrado esto (todos los datos son de España):
El promedio de los años de educación en 1980 era de 5, en el 2010 de 10,4.
Los gastos de consumo final de los hogares (per cápita) en dólares americanos y a precios constantes de 2005 era en 1980 de 9.049; en el 2007 era de 15.822.
La esperanza de vida cuando yo nací (± 1950) era de 62,1 años; en el 2010 es de 81,3 años.
Y el Índice de Desarrollo Humano en 1980 era de 0,680; en el 2010 era de 0,863 (el 20º más alto entre los países del mundo)
No os voy a turrar con más datos. No os voy a explicar cómo se calcula este último índice (se promedian esperanza de vida, educación y PIB per cápita).
La conclusión me parece más que evidente: los datos me empujan a seguir manteniendo el optimismo con el que respondo a las preguntas con las que empezaba esta entrada. La vida va siempre a mejor. En general, claro. Cómo le va a cada uno sólo él lo sabe. Pero, esa no era la pregunta.
Antes de acabar: hay un “índice de calidad de vida” en el que España ocupa el 10º puesto entra todos los países. Y los índices que conozco para el País Vasco siempre son mejores que los del conjunto de España.
Nunca está de más pedir: Democracia Real Ya

martes, 10 de mayo de 2011

Escuela maravillosa (?)

Maravillosa:   “1. adj. Extraordinaria, excelente, admirable.” (R.A.E.)
Maravilla:       “1. f. Suceso o cosa extraordinarios que causan admiración.
2. f. Acción y efecto de maravillar o maravillarse.”  (R.A.E.)

Control (con cuaderno) sobre la Segunda Guerra Mundial:
Pregunta: - ¿Cómo se llamaban los dos bandos participantes y qué países agrupaba cada uno de ellos”
Respuesta: - “Musolini y Hiro Hito” (sic)

Esto no es lo maravilloso, lo que causa admiración. Lo maravilloso viene después. Cuando yo leo en voz alta semejante despropósito en la sala de profesores (y lo hago varias veces) los que me escuchan tienen, de todas todas, un comentario positivo. No dejan de sonreír, pero dicen cosas como: “bueno, no está tan mal”, o “al menos ha acertado con la época” o “pobre, hace todo lo que puede”, o…
Maravillosa: que causa admiración porque siempre busca una visión positiva de… lo que sea.

Cambiando de asunto y “a quien corresponda”:
¿No será éste el mejor momento, el más oportuno para fichar a Pau por el BBB? O, ¿ya no estamos en Bilbao?

miércoles, 4 de mayo de 2011

Cumpleaños

Hoy hace 27 años que soy padre. 27 ya. 27 todavía. Todavía porque esto de ser padre sí que es para toda la vida... y para casi todos los momentos de la vida.
Se deja de ser profesor, definitivamente  y cada vez que hay vacaciones (yo, al menos); se dejan por el camino amistades que fueron y relaciones menos intensas que hubo, compañeros de trabajo y de estudios, colaboradores en diversos proyectos, ...,  pero de ser padre no, casi nunca, en muy pocos momentos, no se deja.
Ser padre es una responsabilidad buscada (al menos la mía), una ilusión querida (al menos la mía), una preocupación compartida y, por encima de todo, un inmenso orgullo.
Muchas veces los hijos no acaban de entenderlo. Es lo que les toca, que yo también fui hijo y aún me acuerdo. Lo entenderán, como lo hemos hecho casi todos los mayores. Es cuestión de tiempo y experiencia (lo que a ellos aún les queda por vivir).
Que hoy mi blog sirva de testigo de esa responsabilidad, de esa ilusión, de la preocupación y del orgullo que hoy siento, para que ellos (los dos) un día puedan releerlo y reescribirlo para sus hijos.
Y, además, y sobre todo, os quiero (a los dos).

lunes, 2 de mayo de 2011

Recomienzo

Me desayuno, muy temprano, demasiado temprano, con la noticia de que: " El Supremo dice 'no' a Bildu, a la que ya solo queda el recurso al Constitucional"
Venía yo de leer a Juan Torres (recomendado: http://www.juantorreslopez.com/impertinencias/137/2353-juezas-y-jueces-al-servicio-de-la-causa) y pensaba que exageraba. ¿Acaso no es el poder judicial el que siempre nos queda a mano para defendernos de los abusos que se cometan contra nosotros? La ley no es perfecta, no lo dice todo, pero los jueces sí son imparciales y están ahí para defenderme. (Bueno, tan tonto no soy, alguna sospecha en contra ya me cabía).
Pero, Juan Torres podría estar exagerando. Ahora ya no es tan fácil pensar que exagera.
Que puedan presentarse a las elecciones y, si ese no es el camino que nos parece más apropiado para dirigir los asuntos públicos, ya lo diremos en las urnas, que ya somos mayores. ¿O no?
No es ésta la mejor noticia para empezar el último trecho de este curso (mi ultimo curso, para vuestra envidia). Pero hay que empezarlo que si no no terminará nunca. A por ellos!!!